Cuántas veces hemos visto ocupar portadas de periódicos, cabeceras de informativos y tertulias en las radios casos de abusos sexuales a menores que llegan a viralizarse en redes sociales y/o convertirse en un suceso de interés nacional. Y cuántas otras víctimas siguen silenciadas, sin atreverse a librarse de ese trauma, a liberar el dolor que sigue acechando su cuerpo y su mente. Estamos ante un tema devastador. Y es que el 80% de los casos de abusos sexuales a menores ocurren en el ámbito familiar. Con el objetivo de informar sobre educación sexual y prevenir el abuso nació el Proyecto Bär de la mano de Karen Nuño y Clara Font, quienes nos develan en este artículo cómo identificar las señales que nos indican que un menor está siendo víctima de un abuso y cómo actuar en estos casos.

La educación sexual es un derecho humano que los adultos debemos transmitir a los menores haciéndoles entender lo extremadamente importante que es tanto que se respete su intimidad como establecer y respetar los límites propios y de los demás.
Con estas dos premisas, Karen Nuño (Maestra especializada en Prevención del Abuso Sexual Infantil) y Clara Font (Educadora Sexual y Máster en Sexualidad y Género) dieron forma al Proyecto Bär en Berlín donde imparten formaciones a familias y docentes a través de talleres con una metodología participativa con el fin de naturalizar y exteriorizar la educación sexual y prevenir el abuso sexual infantil.
En estos cursos, ofrecidos en español y alemán, se proporciona información y recursos y se invita a la auto-reflexión de los participantes para que tomen consciencia del papel tan importante que tienen tanto en casa como en las escuelas y trasladar de forma natural y eficaz sus conocimientos de educación sexual a los menores.

Como padres, educar en sexualidad a nuestros/as hijos/as debería comenzarse a edades muy tempranas, “la sexualidad es inherente al ser humano y nos acompaña toda la vida por lo que es necesario hablar de ello desde el nacimiento siempre teniendo en cuenta la etapa de desarrollo en la que se encuentren”, aseguran nuestras protagonistas.
Ya desde muy pequeños nos pueden preguntar sobre cómo vienen los bebés al mundo o el descubrimiento de su cuerpo, sus emociones y su autoestima. “La forma en la que les respondamos o incluso si evitamos hablar de ello, ya le estaremos transmitiendo nuestra postura al respecto o que en casa o con nosotros no de puede hablar de ello”, añaden Karen y Clara.
Esto refuerza la idea de algunas familias que esperan que la educación sexual se imparta en las escuelas, evitando estas situaciones, algo incómodas para algunos padres. Y, aunque en los centros educativos (alemanes y de otros países) se informa a los alumnos sobre temas generales, a muchas escuelas les resulta difícil identificar hasta dónde se les compete o se les está permitido hablar de estos temas, sobre todo en grupos multiculturales.
- Cómo actuar ante un abuso sexual infantil
Hay que tener en cuenta que se considera abuso sexual con o sin contacto físico. De hecho, “en la mayoría de los casos, el abusador ejerce violencia psicológica para manipular y silenciar a la víctima”, afirman las creadoras del Proyecto Bär.
Por este motivo, según Nuño y Font, “es importante estar atentos a cambios bruscos de actitud y buscar la causa. Si estamos pendientes, podremos detectar posibles situaciones desagradables que estén viviendo, incluido un abuso”.
En el terrible caso que se confirmen las sospechas, el protocolo de actuación según Karen y Clara serían:
1.- La regla de oro es creer siempre a la víctima,
2.- hacer pocas preguntas al respecto,
3.- reforzar la idea de que no ha sido culpa de la criatura,
4.- y ayudarle, primeramente, alejándolo del abusador.
“Nosotras recomendamos siempre asesorarse con alguna organización si existe sospecha de abuso ya que, en la mayoría de los casos no hay una revelación como tal por diversas razones”, señalan las fundadoras del Proyecto Bär.
Estas son las organizaciones en Alemania con las que nos podemos poner en contacto en caso de abuso sexual infantil:
Como padres, es esencial focalizar este tema en dos factores esenciales para transmitir y hacer conscientes a nuestros hijos de que:
1.- Su intimidad debe ser respetada. Por ejemplo, si en la playa no quiere cambiarse el bañador en público, es conveniente buscar un lugar adecuado para ello y no obligarlo a desnudarse frente a todo el mundo si siente pudor (independientemente de la edad del menor).
2.- Establecer y respetar sus límites y los de los demás. Su cuerpo les pertenece y tienen todo el derecho del mundo a negarse a dar un beso si no quiere darlo.
Si nosotros, como padres, nos formamos y somos capaces de darles las herramientas necesarias para que ellos mismos detecten una situación de este calibre, tendrán una mayor capacidad para reaccionar a tiempo y frenar un posible abuso.

Diversas son las secuelas que una víctima de abuso sexual infantil presenta después de vivir un momento tan devastador. No obstante, “queremos recalcar que las víctimas de abuso sexual en la infancia serán capaces de recuperar su vida y vivirla plenamente como cualquier otra persona siempre y cuando se actúe a tiempo y cuente con ayuda profesional”, finalizan Karen y Clara.
Muchísimas gracias Karen Nuño y Clara Font por crear el Proyecto Bär y por vuestra labor esencial en educar a padres y docentes en sexualidad, proporcionándoles las herramientas necesarias para prevenir el abuso sexual infantil. Una lacra que sigue sumando víctimas diarias en todo el mundo.
Quieres participar en un taller del Proyecto Bär o llevarlo a tu centro educativo? Sí? Entonces contacta con ellas a través del email proyectobaer@gmail.com o en su perfil de Instagram. Allí encuentras valiosa información, recursos prácticos y las fechas de los próximos cursos.